Miopía

     No me termina de convencer, pero tampoco me termina de no convencer. No es que no me guste ni el poema ni la idea, sino que siento que le falta algo. Seguramente acabe cambiándolo por completo, pero por ahora me apetece compartirlo por si en el fondo me he convertido en un escritor maniático y no hace falta cambiar nada. Si puedes y te apetece, dímelo en un comentario o por twitter (@PSalitroso). 

¡Gracias!

Hoy he visto a mi cabeza

separarse de mi cuerpo

porque no quiere seguir

moviendo esta mierda.

Hoy he visto las consecuencias

de causas perdidas en cada

batalla ganada por los pelos,

como cuando creí haberte conquistado

pero en realidad vivías en otro sitio.

Hoy he visto detrás de mí

al fantasma de las navidades pasadas

porque aún le debo el dinero

del regalo de mi perro.

Hoy he visto en qué lenguaje

estoy programado para morir

pero google traductor no lo detecta,

lo que me hace pensar que

Dios necesita clases de informática.

Hoy he visto verbos en subjuntivo

indicando el camino a seguir

a quien siempre prefirió ir dando un rodeo,

jugando a sumar matrículas de coches

que están a punto de atropellarme

y a esquivarlos sin pisar las líneas del suelo.

Hoy he visto una mirada

que atrapaba a un niño

dentro de dos infinitos

apodados pupilas.

Hoy he visto manchas de tomate en mi pijama,

una mente que ya nadie visita

porque no para de autodestruirse,

un cuerpo que ya nadie toca

porque no hace música,

unos ojos que ya nadie mira

por miedo a caerse en ellos,

unos brazos que no abrazan a nadie

porque ya nadie quiere un abrazo.

Hoy he visto un hombre

cansado de ver siempre

lo mismo cada vez

que se mira al espejo.

Después me he lavado la cara

y me he puesto las lentillas,

dispuesto a seguir creyendo

que sin ellas no veo nada.

(15/09/2016)