tortugas ninja
solo en las alcantarillas
alimentándome de recuerdos,
encuentro flores bonitas
que al rato sin querer piso.
supongo que estaré por aquí
hasta que me echen las ...
¿cómo se llamaban?
a veces subo al exterior
vestido de incógnita
para que nadie me pregunte.
una vez estuve en un hotel de lujo
con los colores perfectos de un dibujo,
pero rápido me echaron a la calle
al verme la pinta de garabato.
cuántas ciudades debo pisar
para saber que no me gustan las ciudades.
desde aquí no veo las estrellas
y ellas tampoco me ven a mí,
luna estará preocupada.
la vida se basa en expectativas,
si te comportas como un robot
no se esperará de ti humanidad,
y lo que pienses o digas o sientas
dará absolutamente lo mismo.
robot no mata a robot, pero
robot tampoco ayuda a robot,
ni se preocupa por robot.
pero de eso no iba este poema.
qué sentido tiene andar siempre
por las mismas calles,
ir a los mismos sitios,
regresar al mismo lugar,
cambiar de vez en cuando.
planetas giran toda su existencia
sin ser conscientes de su monotonía,
estrellas brillan toda su existencia
sin ser conscientes de su deterioro,
galaxias crecen toda su existencia
sin ser nada más que una galaxia.
nosotros al menos quiero pensar,
somos conscientes una vez al año.
todo poema debe acabar
para dar paso a otros poemas,
pero, ¿y si esos poemas
no quieren un final
porque no se sienten ni empezados?
la nueva moda entre los jóvenes:
cuestionarse temas existenciales
mientras se drogan en el parque.
sinceramente de esto no iba el poema.
la fugacidad de la vida,
monotonía y homogeneidad,
dar significado a tu existencia,
incertidumbre ante el olvido,
la nada como enemigo,
son temas que solamente
las tortugas ninja podrían tratar.
¡me cago en la mierda, era eso!
(31/07/2019)
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