La cosa es quejarse

     Quejas, quejas y más quejas. El mundo está lleno de quejas. Nada nos satisface lo suficiente. Eso nos lleva a quejarnos y a criticar absolutamente todo, menos a nosotros mismos (en la mayoría de casos). Que no quiero decir que quejarse esté mal, pero como siempre a veces abusamos de las cosas hasta que pierden su sentido. El poema también lleva auto-crítica como acostumbro a hacer.

Nos quejamos de lo que está mal

porque obviamente está mal.

Nos quejamos de lo que está bien

porque podría estar mejor.

Nos quejamos de los que no se quejan

porque se ve que les da igual.

Nos quejamos de los que se quejan

porque no vaya a ser que cambien algo.

Me quejo de que todo el mundo se queja

sin saber muy bien qué quiero conseguir.

Alguien vendrá a quejarse de que me creo

moralmente superior por quejarme de los demás.

Como un día dijo un sabio desde su sofá:

la cosa es quejarse.

Menos de nosotros mismos,

de eso nunca nos vamos a quejar.

(10/01/2017)